Historias del Ascensor (XIV) | Ascensores y terremotos
Si vives en Granada o en ciertas partes de Andalucía (los últimos terremotos se han llegado a sentir en Málaga), seguro que te has planteado si subir a un ascensor durante un sismo es la mejor idea. Ya habrás visto, en alguna guía, que no, que lo ideal, en este caso, es coger las escaleras. Te explicamos por qué y te contamos alguna anécdota.
Coger un ascensor durante un terremoto no es -todavía- buena idea
Aunque los ascensores son sistemas cada vez más seguros, los efectos de los terremotos impactan en la seguridad de diversos tipos de ascensores. Los ascensores eléctricos, los más habituales, corren peligro de desprenderse y protagonizar una caída incontrolada.
Tal y como vemos en la anterior tabla, los ascensores eléctricos sufren sobremanera durante un terremoto. En definitiva, la electricidad puede interrumpirse y que quedemos atrapados. No obstante, cabe señalar que hay otros tipos de ascensores que evitan en cierta medida este tipo de peligros, como pueden ser los ascensores hidráulicos.
Ascensores Kanto Branch
En Japón, país propenso a este tipo de catástrofes, se tomaron medidas tras un terremoto de magnitud 8.1 que dejó a 19.000 ascensores sin funcionar. Una de ellas, quizá la más sorprendente, fue que se instalaran baños y fuentes de agua potable en algunos ascensores, para hacer más llevadero el mal rato de quedarte encerrado en un ascensor por un terremoto.
Más allá, la Asociación Japonesa Ascensores Kanto Branch, un organismo nipón creado en torno a la industria del elevador, puso en marcha una serie de medidas para tratar de evitar que miles personas quedaran atrapadas. Por ejemplo, fuentes de abastecimiento energético de reserva y sistemas de alerta temprana que ayudarían a la gente a escapar de ascensores si ocurría un terremoto.