Ascensores, montacargas y montacoches
En Vilber Elevación, disponemos de ascensores montacargas y de elevadores de coches, tanto eléctricos como hidráulicos, con capacidad para transportar y propulsar mercancías de todos los pesos y tamaños. Les resultarán de gran utilidad en todo tipo de negocios relacionados con la hostelería y con la restauración, así como en talleres y en naves industriales.
Ascensores, montacargas y montacoches
En Vilber Elevación, disponemos de ascensores montacargas y de elevadores de coches, tanto eléctricos como hidráulicos, con capacidad para transportar y propulsar mercancías de todos los pesos y tamaños. Les resultarán de gran utilidad en todo tipo de negocios relacionados con la hostelería y con la restauración, así como en talleres y en naves industriales.
¿Qué es un montacargas / montacoche?
Los montacargas son equipos de elevación que se utilizan, como su propio nombre indica, para transportar todo tipo de cargamentos de un lado a otro. Suelen instalarse en entornos profesionales con un alto nivel de trabajo, ya que ayudan a optimizar los procesos y a mejorar el ritmo en numerosas actividades laborales.
Se pueden categorizar en dos grandes grupos, en función del motor mediante el cual funcionen: eléctricos y a combustión.
- Montacargas eléctricos. Cuentan con baterías de gran tamaño que están compuestas por ácido y plomo. Consumen poco combustible y su mantenimiento no tiene que ser llevado a cabo por mecánicos especializados. Pueden instalarse en todo tipo de espacios cubiertos sin que supongan ningún riesgo para los operarios.
- Montacargas a combustión. Como su propio nombre indica, son aquellos que funcionan a base de biodiesel o nafta. Su característica y beneficio principal es que pueden recargarse rápidamente y utilizarse al instante, es decir, no es necesario esperar para volver a darle uso.
¿Qué es un montacargas / montacoche?
Los montacargas son equipos de elevación que se utilizan, como su propio nombre indica, para transportar todo tipo de cargamentos de un lado a otro. Suelen instalarse en entornos profesionales con un alto nivel de trabajo, ya que ayudan a optimizar los procesos y a mejorar el ritmo en numerosas actividades laborales.
Se pueden categorizar en dos grandes grupos, en función del motor mediante el cual funcionen: eléctricos y a combustión.
- Montacargas eléctricos. Cuentan con baterías de gran tamaño que están compuestas por ácido y plomo. Consumen poco combustible y su mantenimiento no tiene que ser llevado a cabo por mecánicos especializados. Pueden instalarse en todo tipo de espacios cubiertos sin que supongan ningún riesgo para los operarios.
- Montacargas a combustión. Como su propio nombre indica, son aquellos que funcionan a base de biodiesel o nafta. Su característica y beneficio principal es que pueden recargarse rápidamente y utilizarse al instante, es decir, no es necesario esperar para volver a darle uso.
El funcionamiento es similar al de un montacargas convencional. La caja donde está el coche se desplaza hacia arriba o hacia abajo, donde se controla la seguridad del sistema mediante varios elementos que aseguran que el proceso se hace de manera normal.
Ventajas de tener un montacoches en edificios y estacionamientos
Entre las ventajas de un montacoches podemos destacar:
- El espacio que ocupan es mínimo
- La instalación es simple y rápida
- No se necesita tener un espacio reservado para la maquinaria
- El consumo del sistema es bajo. Afecta de forma positiva al medio ambiente y a la factura de luz
- La seguridad está garantizada
- Es silencioso
Consideraciones de seguridad al usar montacoches
Entre las consideraciones de seguridad durante la utilización del montacoches podemos destacar:
- No realizar ninguna operación de ajuste con el equipo en marcha
- No manipular ninguna parte del equipo o instalación que pueda estar en tensión o que se encuentre señalizada con riesgo eléctrico sin contar con autorización y conocimientos específicos para ello
- Evitar las posturas forzadas y continuadas durante las operaciones en las que se haga uso del elevador
- Alternar labores para variar las posturas
- Adecuar la altura del elevador en función del trabajo a desarrollar.
- Antes de proceder a elevar un vehículo se debe posicionar sobre las vías e inmovilizarlo
- Mantenerse fuera de la trayectoria del elevador cuando éste se encuentre en movimiento
- La velocidad máxima de utilización tanto en subida como en bajada debe ser de 0,15 m/s
- Seguir las recomendaciones de los fabricantes de vehículos para disponer los puntos de elevación
- Posicionar el vehículo de manera que el peso se distribuya de forma equilibrada, con su centro de gravedad en medio de los adaptadores
- Tener en cuenta las posibles variaciones en la distribución de pesos cuando se elimine algún componente del vehículo. Si es necesario, emplear soportes adicionales
- No subirse a los elementos de sostenimiento ni al vehículo que vaya a ser elevado
- Detener inmediatamente el elevador si se advirtieran anomalías de funcionamiento
- En caso de que un vehículo muestre inestabilidad, alejarse del entorno
- Evitar mover bruscamente el vehículo cuando esté sobre el montacoches
- En caso de fallo o avería, señalizar correctamente el equipo
